Tres tips para cuidar tu postura corporal este cuatrimestre

La cursada frente a la computadora puede no ser demoledora. Prestá atención a este artículo.

Los estudiantes pasaron a vivir sus estudios frente a una computadora. La afección por esta realidad tiene múltiples frentes, pero uno de los más importantes es el físico. El cansancio de la vista, el dolor de cabeza, o los dolores de espalda son algunas de las afecciones físicas que se desarrollaron por lo que podríamos denominar el burnout tecnológico. Muchas de las horas de clase que el alumno antes pasaba con sus compañeros, ahora debe pasarlas frente a la pantalla. 

Uno de los grandes causantes de estos problemas físicos es el descuido de la postura corporal. Esto no solo afecta al cuerpo ⏤con dolores de cuello, espalda y posibles problemas óseos⏤ sino también a la productividad y al humor. El problema va de pies a cabeza y afecta todo lo que uno haga en el día. Muchas veces, se vuelve insoportable o, incluso, se puede transformar en una situación grave, presentando, por ejemplo, dificultades respiratorias o desgastes prematuros de la columna.

Entonces, ¿qué podemos hacer para evitar estos problemas? Veamos, primero, a qué llamamos postura, y luego algunos tips para relajarla.

A qué se llama postura corporal

La postura es la manera en que sostenemos el cuerpo, y se considera que existen dos tipos: la dinámica y la estática.

La postura dinámica tiene que ver con la manera en que nos sostenemos al estar en movimiento, al caminar, correr o agacharnos para levantar algo del suelo. La postura estática se relaciona con nuestra forma de mantenernos cuando no estamos en movimiento; por ejemplo, al estar sentados, de pie o durmiendo.

Lograr una postura correcta tiene que ver, sobre todo, con cuidar la posición de nuestra columna vertebral. La columna tiene tres curvas naturales: en el cuello, en la espalda media y en la espalda baja. Una postura correcta logra mantener esas curvas, no las aumenta, a la vez que mantiene una cabeza erguida y los hombros alineados entre sí.

Tres tips para estirar la musculatura y relajar la postura corporal

1. Caminando

En este tip, es necesario que la persona se ponga de pie y deje, por un segundo, su lugar en el asiento. Deberá caminar un poco, parándose de forma erguida y respirando con profundidad. ¡Alto! Hay una técnica: al inhalar profundamente, se debe levantar los hombros y llevarlos hacia atrás; al exhalar, hay que bajar los hombros llevándolos hacia atrás. 

Este trabajo se debe hacer caminando, y cuantas más veces al día, mejor.

2. Sentado

Durante la posición sentada. sin levantarse, se pueden realizar inclinaciones pélvicas de la siguiente manera.

1. Primero, hay que sentarse con ambas plantas del pie apoyadas en el suelo y las manos apoyadas en las caras interiores del muslo. 

2. Luego, se debe subir los hombros y sacar pecho hacia arriba, generando una curvatura hacia adentro de la espalda, mientras se inhala. 

3. Finalmente, la relajación de los músculos y la respiración se genera a partir de la vuelta de los hombros y de la espalda: estos continúan hasta quedar, los hombros, arqueados hacia adelante y, la espalda, curvada hacia afuera.

Adicionalmente, cada 40 minutos se recomienda levantarse y mover un poco el cuerpo y la espalda (por ejemplo con el ejercicio 1).

3. Acostado

En este tercer caso, la persona debe acostarse boca arriba en una cama o en una superficie plana y acolchonada. Se tiene que doblar las rodillas en V invertida, apoyando la planta de los pies en la superficie. Entonces debe, lentamente, inhalar, y al exhalar, ir elevando el coxis y la espina dorsal sosteniéndose en los omóplatos. En equilibrio -el coxis y gran parte de la espalda en el aire, sostenidos por la planta de los pies y los omóplatos-, se puede respirar de nuevo, profundamente, y exhalar mientras se vuelve a la posición primera.

Parece difícil, pero no lo es: ¡comprobalo!

¿Qué más hacer? Soluciones D.E.M.A.   

El dolor de espalda por una mala postura corporal puede ser extremadamente molesto: aún más en un contexto donde se debe permanecer sentado, sin mucha opción.

D.E.M.A. ofrece otra solución. Los correctores posturales son soportes graduables del torso que contribuyen a mantener los hombros erguidos y lograr una postura equilibrada del cuerpo. Existen diferentes opciones:

• Chaleco corrector postural (C029): diseñado en neoprene de 4 milímetros de espesor, es práctico y funcional.

• Corrector postural acolchado (E026-U): confeccionado con 2 varillas posteriores y tela de velour.

• Corrector postural con faja (E026-A): elaborado en elástico afelpado de mayor compresión. Incluye 4 varillas de aluminio posteriores y una faja de contención abdominal con doble sobrebanda de sujeción.

Los dolores de espalda pueden parecer sin solución, pero un corrector postural puede ayudarte en gran medida. Estos actúan en las regiones de la espalda que tienden, normalmente, a presentar curvaturas para poder sostener la buena postura corporal de la persona. Si quieres saber cómo utilizar y elegir correctores posturales, te recomendamos este post.

En todos los casos, podés adquirir estos productos en un punto de venta cercano a tu ubicación. Para encontrar una ortopedia, consultá nuestro mapa debajo.

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