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Soluciones prácticas para recuperarte de una hernia inguinal

Escrito por D.E.M.A. | 22 mayo, 2020

El braguero, los calzoncillos y las trusas de contención pueden ayudarte a transitar mejor el periodo de recuperación de una hernia inguinal. Conocé más sobre ellos.

La hernia inguinal se genera cuando el tejido blando del intestino sobresale a través de un punto débil de la pared abdominal, usualmente debido a un esfuerzo, una actividad extenuante u otras variables. La protuberancia que se produce puede llegar a ser muy dolorosa, en especial al toser, inclinarse o levantar peso.

En algunas personas, la debilidad en la pared abdominal que facilita la hernia inguinal sucede al nacer; en otras personas, las hernias ocurren más tarde en la vida, cuando la musculatura se debilita por la edad o a causa de un nivel de actividad física agotador.

Una hernia inguinal no necesariamente es peligrosa, pero si no mejora por sí sola puede provocar algunas complicaciones, como la hernia encarcelada o la obstrucción de los tejidos adyacentes. En estos casos puede hacer falta una cirugía para corregir el problema.

Soluciones prácticas para contener una hernia inguinal

Cuando la hernia es pequeña y no ocasiona mayores molestias, el médico puede que te recomiende esperar y mantenerla en observación. En estos casos, utilizar un braguero como soporte inguinal puede ayudar a aliviar los síntomas .

Un braguero inguinal aporta sujeción al tejido y alivia las molestias ocasionadas por la presencia del bulto. Usualmente se confeccionan en tela suave y acolchada e incluyen un accesorio de soporte adicional interior para brindar contención, logrando favorecer su uso durante las actividades cotidianas sin comprometer la comodidad.

D.E.M.A. produce dos tipos de braguero: uno simple, indicado para hernias en un solo lado de la ingle; y otro doble, que contiene los tejidos a ambos lados del pubis. En ambos casos, se trata de productos cómodos que ayudan a transitar mejor las hernias inguinales, y favorecen la contención y alivio de malestares en los pre-operatorios.

Otra contención muy utilizada en los casos leves es el calzoncillo o suspensor anatómico. Estos calzoncillos alivian tensiones musculares y los malestares asociados con las hernias, la flacidez u otros problemas derivados de un sostén abdominal deteriorado. Se utiliza en el día a día e incluso durante prácticas deportivas, ya que cuenta con un suplemento de contención muy suave confeccionado en algodón y elastómero. El mismo diseño puede encontrarse en su modelo para mujeres (trusas).

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